jueves, 19 de julio de 2007
77. Charletas Trascendentales
Una de las líneas de su ideario personal es que las personas somos como un "Rasca y Gana", ya que a poco que eches un vistazo a su interior, te la juegas. Dice que las charletas trascendentales miden la valía de una persona, su fondo, su riqueza interior.
Es un personaje inquietante cuya conversación me estimula. Hay quien dice que es un chaval infranqueable, que establece una especie de distancia entre él y los demás, que no hay forma de llegar a él del mismo modo que el dardo llega al mismo corazón de la diana.
Lo que creo es que es tímido, y que piensa que su interior es tan complicado que nadie lo entenderá. Que lo que tiene que decir es tan trascendente que no lo puede compartir con cualquiera, sólo con quien lo sepa valorar. Sus conversaciones y "desvaríos" son objeto de colección privada. Quien no lo sabe ver le dice que se complica demasiado, que piensa demasiado, que es un exagerado, pero sus predicciones acaban cumpliéndose con un acierto preocupante.
Así es él, y por eso disfruto tanto sus charlas. Conversar con él es es como una especie de juego de estrategia: tanto cuento yo, tanto cuentas tú, para al final dejarlo en tablas, sin el sentimiento de haber hablado demasiado de uno mismo ni la sensación de haber preguntado más de la cuenta.
Dice haberse vuelto un escéptico, y que esa es su forma de luchar contra el pesimismo. Un escéptico es alguien que no es positivo pero que tampoco cae en lo negro, según él. Dice no saber lo que tiene que hacer con su vida, y quizá una ayuda sea verlo desde la otra perspectiva: "¿Qué es lo que NO tienes que / quieres hacer con tu vida?"
Es una sensación curiosa sentirte útil para alguien que siempre tuvo la palabra adecuada, el consejo certero y una brillantez aplastante en sus observaciones. Es como el gurú del pensamiento actual para los que lo conocemos, si bien sólo nos damos cuenta claramente de esto en momentos de apuro.
Te entiendan o no, la felicidad es un camino propio. Lo que cuenta al final es todo lo que hayas adelantado en ese camino, sin hacer comparaciones con otras personas y otros caminos. Me hace mucho bien que seas como eres, doy pasos en mi camino personal gracias a ti.
Sé que me lees desde hace tiempo, aunque no escribas. No será por este medio, desde luego, pero nos debemos algo. ¿Para cuándo otra charleta?
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7 comentarios:
Existen esa clase de personas que hace que uno vea la vida de otra manera...tienen un modo de reflexionar distinto a nosotros... y hace que dudemos hacerca de lo que pensamos, no porque cambiemos de opinion, si no porque te lo hacen ver desde otra perspectiva.
Son como tesoros que te encontras en el camino.
Como vos decis, la felicidad es un camino propio, a algunos les cuesta mas a otros menos encontrar ese camino, otros buscan la felicidad a costa de cualquier precio.
Pero la cuestion esta en uno mismo, en sentirse bien interiormente...
Te dejo abrazos! Javi!
Caramba... no sabes lo que me apetecería participar de esa charleta. Me ha encantado el post, lo comparto totalmente. Me seguiré pasando por aquí.
Besos.
(Por cierto, te he visto en la fiesta de Ambrosía, hay que ver la de gente interesante que se puede conocer en las fiestas, jejejej).
BETT:
¡Feliz día! Sí, tienes razón, se necesitan personas que nos sepan poner los pies en el camino correcto con sus indicaciones. Seremos libres de seguirlas o no, pero ese apoyo es importante.
Sobre la felicidad... hay caminos que da gusto seguir :)
ILLYAKIN:
Que sepas que pensaré qué historieta contarle al crío para que no apriete hacia dentro. ¡Pobre criatura!
Encantado de tenerte de visita. Esta ambrosía es que monta buenas fiestas, ¿que no?
He tenido muchas charletas de esas contigo.
Peque, disfruta de estos días, que te voy a extrañar millones, me quedo muy cerquita de tí.
besos.
Estoy en la primera estación. Deséenme suerte...
¡Hasta la vuelta!
Hasta la vuelta bebe!
Cuidate, se te extrañara mucho!
:-**
no era Berr, era Bett
(es el sueño :P)
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