domingo, 8 de abril de 2007

37. A Gritos

Los primeros rayos de sol se escapaban del cielo a escondidas.

Es el último día para muchos que han venido buscando esos mismos rayos durante los pasados días.

La playa y las calles están desiertas; aprovecho mi insomnio y los ecos de la soledad para gritar bien alto dos palabras que bien podrían romper el mismo muro del cielo en dos.

Grité una vez; fueron dos palabras. El eco, en vez de devolverme rítmicas y dulces repeticiones, me regalaba bofetadas cada vez más lejanas, pero bofetadas a fin de cuentas.

Cada vez más lejanas, cada vez más débiles. Pero yo grité fuerte, y seguro que hubo quien lo oyó.

Juro que las grité, y juro que eran dos. Dos palabras que alguien escuchó.

Pero tú seguías durmiendo.


El Sueño de Gala (Sueño del Paraíso) - Salvador Dalí

2 comentarios:

Bett dijo...

Grita Javi!, sigue gritando, desahoga tu alma, no hay nada mas gratificante que eso.
Que el cielo se rompa! que va!,pero si no lo hacias creo que eras tu el que se derrumbaria guardando ese sentimiento.

Te dejo un beso.

Guitarrero dijo...

Creo que no me queda otra, Bett. Al menos que no se diga que no grité para que se dieran cuenta.

Un día de estos el cielo sobre mí se romperá. Hasta entonces, creo que toca seguir gritando. Aunque el resto duerma.